Científicos de Israel han confirmado la existencia del antiguo reino de Canaán, mencionado en la Biblia gracias a un análisis actualizado de ADN antiguo.
Un estudio reciente de la Universidad Hebrea de Jerusalén ha arrojado luz sobre las características genómicas de los cananeos, cuya herencia genética sobrevive en muchos judíos y árabes modernos.
Se trataría de una comunidad demográfica coherente perfilada en un territorio más extenso que el actual estado hebreo, más Cisjordania (Palestina) y que incluye también regiones del Líbano, Siria y Jordania.
La investigación
Los investigadores secuenciaron 73 especímenes de ADN recogidos en varios sitios arqueológicos del Levante del Sur, la región comprendida entre la costa este del mar Mediterráneo y el valle del Jordán, las antiguas ciudades fenicias en el norte y la frontera de Egipto en el sur. Casi todos aquellos restos humanos se remontan a la Edad del Bronce y dos a la del Hierro.
Asimismo, los investigadores agregaron datos previamente reportados de 20 individuos de cuatro sitios para generar un conjunto de informes compuesto por el ADN de 93 individuos en total.
El análisis genómico mostró que los cananeos representan un grupo claro.
«Las personas de todos los sitios son muy similares genéticamente, aunque con diferencias sutiles, lo que demuestra que los ‘cananeos’ definidos arqueológica e históricamente, corresponden a un grupo demográficamente coherente», explicó Liran Carmel, de la Universidad Hebrea de Jerusalén.
La antigüedad de todo el material incluido en el estudio quedó circunscrita a los años 3.500 y 1.150 a. C., mientras que la extensión geográfica quedó delimitada entre Sidón (Líbano) y Ascalón (Israel).
Los hallazgos sugieren que los pobladores originarios se mezclaban con los descendientes de Irán. Más tarde se produjo un flujo migratorio del norte y se comprobó que tres de los 93 especímenes del ADN pertenecen al patrón del Cáucaso antiguo.
Influencia hasta la actualidad
Además de volver a los orígenes de los cananeos, los investigadores estudiaron su relación con las poblaciones actuales. Aunque no han podido aclarar su influencia claramente, han podido descubrir que la mitad de los antepasados de muchos de los colonos judíos y árabes de la región actualmente provienen del Cáucaso y las montañas Zagros en Irán.
Carmel ha dicho que ampliarán su muestreo tanto en el espacio como en el tiempo, incluida la Edad del Hierro, para investigar los orígenes de las poblaciones de otros reinos bíblicos.
Como los egipcios construyeron pirámides y los mesopotámicos construyeron zigurats hace unos 4.500 años, los cananeos comenzaron a desarrollar pueblos y ciudades entre estas grandes potencias. Aparecen por primera vez en el registro histórico alrededor de 1800 a.C., cuando el rey de la ciudad-estado de Mari en el este de Siria de hoy se quejó de «ladrones y cananeos».
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Los cananeos se mencionan más de 150 veces en la Biblia, según el relato eran descendientes de Canaán, nieto de Noé, quien era hijo de Cam.
El estudio ha sido publicado en la revista Cell.
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