Nave OSIRIS-REx de la NASA halla agua en un asteroide

La nave espacial OSIRIS-REx de la NASA que se encuentra desde la semana pasada orbitando alrededor del asteroide Bennu ha encontrado una fuerte evidencia espectral de la presencia de agua en las rocas de dicho asteroide.

La sonda «Origins, Spectral Interpretation, Resource Identification, Security-Regolith Explorer» OSIRIS-REx fue lanzada en septiembre de 2016 con el objetivo de llevar a la Tierra una muestra de los materiales de la superficie de Bennu. Desde agosto hasta diciembre de este año, la nave espacial recorrió los últimos 2,2 millones de kilómetros de su viaje para finalmente llegar a una distancia de 19 kilómetros del asteroide el 3 de diciembre.

Los datos obtenidos por los espectrómetros de la nave revelan la presencia de moléculas que contienen oxígeno y átomos de hidrógeno unidos entre sí, conocidos como ‘hidroxilos’.

El equipo sugiere que los hidroxilos existen universalmente en minerales arcillosos de Bennu que contienen agua, lo que significa que el material rocoso de este asteroide interactuó con el agua en algún momento. Si bien Bennu es demasiado pequeño como para haber alojado agua líquida, el hallazgo indica que en algún momento hubo agua líquida en su ‘cuerpo-padre’, un asteroide mucho más grande del cuál se desprendió.

Este hallazgo puede proporcionar un vínculo importante entre lo que creemos que sucedió en el espacio con asteroides como Bennu y lo que vemos en los meteoritos que los científicos estudian en el laboratorio», dijo Ellen Howell, miembro del grupo de análisis espectral de la misión.

Hace poco, la NASA anunció que la OSIRIS-REx había completado la primera fase de su misión, que consistía en alcanzar la órbita del asteroide y, a partir de ahora, acompañará a Bennu como si fuera su satélite, para estudiar cómo se desplazan los planetoides sin una onda gravitatoria definida.

A lo largo de los próximos doce meses, además, trabajará en localizar un lugar idóneo para el aterrizaje en el asteroide, con el fin de comenzar a recoger muestras que puedan ser analizadas cuando la aeronave vuelva a casa.

«Lo que solía ser ciencia ficción ahora es una realidad», subrayó el presidente de la Universidad de Arizona, Robert C. Robbins. «Nuestro trabajo en Bennu nos acerca un paso más a la posibilidad de que los asteroides proporcionen a los astronautas recursos como combustible y agua en futuras misiones en el sistema solar».

También puede interesarte: NASA confirmó que la Voyager 2 ha entrado en el espacio interestelar.

Los miembros del equipo de la misión, liderada por la Universidad de Arizona (EE.UU.), presentaron el hallazgo en la reunión anual de la Unión Geofísica Americana en Washington.

Te recomendamos leer:

Total
0
Shares
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Posts relacionados