La Glándula pineal y su conexión con el Tercer ojo: atributos bioquímicos y místicos

La Glándula pineal, ubicada en el centro del cerebro: regula los estados de consciencia y escondería un poder metafísico y espiritual.

Místicos y filósofos han atribuido un carácter espiritual poderoso a la glándula pineal, el misterioso órgano que regula nuestro ciclo del sueño y los estados de consciencia. La glándula tiene forma de cono de pino y se encuentra muy adentro del cerebro humano, al nivel de los ojos. Estaría conectada, o sería la base del llamado «Tercer ojo», uno de los presuntos centros de energía espiritual y punto de contacto con otras dimensiones para el ser humano.

Forma parte del sistema endocrino, el conjunto de órganos que segregan hormonas, con el fin de regular funciones del cuerpo humano. Es muy pequeña, del tamaño de un grano de arroz (5-8 mm) y se encuentra justo en el centro de los dos hemisferios izquierdo y derecho del cerebro humano.

Glándula pineal (en rojo en la parte posterior del cerebro). Crédito: Wikimedia Commmons/BodyParts3D_Anatomography

Su principal función es la producción de melatonina, una hormona que participa en varios procesos celulares y neuroendocrinos. La melatonina regula los patrones del sueño (el ritmo circadiano), ya que su secreción se activa más en la noche (con la oscuridad).

Conexión con el Tercer ojo

Su función de regulación de los patrones del sueño se puede traducir al manejo de estados de consciencia en el ser humano. Según el misticismo y esoterismo contemporáneo, esto indicaría un tipo de visión extradimensional: la glándula pineal sería como un receptor de información de otras dimensiones. Esto se podría percibir durante experiencias de sueños, sueños lúcidos y la meditación (el llamado «Viaje astral» estaría relacionado).

Chakras o puntos energéticos del cuerpo humano, el Tercer ojo es el sexto chakra. Crédito: hermandadblanca.org.

Debido a esa cualidad metafísica, es que se considera a este órgano como la raíz del mismísimo Tercer ojo, el punto enérgico espiritual ubicado entre nuestros ojos. De hecho, un estudio estableció que la glándula pineal posee fotorreceptores (receptores de luz) con los mismos componentes de la retina del ojo.

El Tercer ojo proveería percepción extrasensorial y conexión con dimensiones espirituales. Esto se ha venido explicando desde el hinduismo antiguo.

Calcificación de la Glándula pineal y como contrarrestarla

Otra imagen del cerebro humano y la glándula pineal. Crédito: humansarefree.com.

Se sabe que la glándula pineal va rodeándose de calcio (calcificándose) con los años, aumentando con la edad. Por eso es que filósofos espirituales y médicos alternativos consideran que hay que disminuir esa calcificación para desarrollarla y «activarla». Entre los métodos para lograrlo se encuentran:

    • Seguir una dieta saludable;
    • Eliminar toxinas del medio ambiente y la comida (como el fluoruro);
    • Llevar una vida tranquila (sin estrés);
    • Evitar la exposición a radiación electromagnética (como la de teléfonos celulares);
    • Terapias de exposición a la luz solar (luz leve del amanecer y antes del anochecer);
    • Ejercicios de meditación.

Científicos todavía consideran a la glándula pineal como misteriosa, ya que no se entiende completamente su función. También hay indicios de que influye en el estado anímico y niveles de estrés. Aunque no se promueve en la ciencia tradicional, su conexión espiritual con el Tercer ojo parece muy lógica.

 

Referencias: HealthLine / GlobalHealingCenter / UpliftConnect.

 

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